En los actos de inauguración de los Juegos Centroamericanos y del Caribe que se celebran en Mayagüez un grupo de atletas realizaron un acto de protesta desplegando una pancarta que decía: “Tarjeta Rojo para el Gobierno de Puerto Rico”:
Esta protesta fue censurada en la transmisión que hiciera el Canal del Gobierno pero como evidencia quedan las fotos y la memoria de aquellos que estaban presentes en los actos. Hay decenas de razones para protestar contra el Gobierno de Luis Fortuño: Ley 7, abuso policíaco, ataques a la cultura y la educación de nuestro país, despido de miles de empleados, entre otras. Estos atletas merecen nuestra admiración por atreverse a expresar lo que muchos sentimos.
Sin embargo, hoy estos atletas fueron amonestados por el Comité de Disciplina del Comité Olímpico de Puerto Rico (Copur):
Los integrantes del Comité determinaron mediante una resolución que el escrito “era alusivo a asuntos no deportivos” y se reservaron el derecho a “emitir una amonestación sumaria a los participantes de esta acción”
Si la razón por la amonestación es que el mensaje “era alusivo a asuntos no deportivos”, el Copur tendría que amonestar a los que participaron en las actividades artísticas, a los que nos aburrieron con sus mensajes no deportivos, en fin, a casi todos los que participaron de esa ceremonia que no fue un acto “deportivo”. Por ejemplo, yo amonestaría a Olga Tañón por el traje ridículo que tenía; a Héctor Cardona por dar un mensaje de más de 10 minutos; al alcalde de Mayagüez por vestirse de blanco; a Ray Cruz por su irresponsabilidad y al Gobernador de Puerto Rico por su cobardía.
Pero la verdadera razón para amonestar a este grupo de atletas es aplacar la resistencia y la disidencia, es mantenernos a todos tranquilitos y en obediencia. La verdadera razón es mostrarle al mundo que en Puerto Rico todo está en perfecto orden y todos estamos encantados con el Gobierno que tenemos. Nos invitan a seguir mostrando “la mejor cara ante el mundo”.
En un país consciente de sus problemas y defensor de la libre expresión, este acto de protesta sería respetado y reconocido como parte de lo que significa vivir en una sociedad democrática. Estos atletas anónimos merecen medalla de oro por defender la dignidad y la autenticidad de este pueblo ante los que prefieren vivir de las apariencias y la imagen. !Hay que seguir levantando tarjetas rojas!
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