En realidad no hay trabajos que sean más importantes que otros. La diferencia entre trabajos más valiosos que otros ha tenido consecuencias negativas para nuestra sociedad. Lo que existen son trabajos que se hacen con pasión y aquellos que se hacen con indiferencia. El trabajo que se hace con pasión se hace con esmero, con cuidado y con la actitud de que en el momento es lo más importante que tenemos que hacer.
Desde hace tiempo al llegar a eso de las 6:30 de la mañana a la Universidad, siempre me encuentro con Don Félix con su carretilla a cuestas realizando la tarea de mantener limpio los alrededores de nuestro Recinto. Lo que siempre me ha llamado la atención es la intensidad y la dedicación que Don Félix pone en esa tarea. Lo hace con la concentración de un Maestro Zen y el cuidado de un médico cirujano. Lo hace como el esmero del artista que trabaja su obra maestra. Mi admiración y felicitaciones para el incansable Don Félix.
3 comentarios
Es bueno reconocer a los trabajadores de verdad. Otro gran trabajador de nuestro recinto en Don Edwin, nuestro querido conserje del tercer piso del Edificio Sánchez Hidalgo. Temprano en la mañana trabaja por tener el tercer piso limpio, pero bien limpio. Con una actitud positiva, una sonrisa aun cuando sea un lunes por la madrugada.
Autor
Eduardo;
Si, Don Edwin también es de lo que se faja grandemente. Ese tercer piso de SH se ve inmaculado.
Esto es muestra de que tenemos que valorar lo que tenemos, darle emepeño y amor todos los días a nuestra faena.